El hombre de Arizona, Mazzotta, admitió haber participado en blanqueo de capital y en obstrucción a la justicia, utilizando promesas falsas y Bots para engañar a los inversores, con un monto involucrado de más de 13 millones de dólares, y falsificó agencias gubernamentales para obtener fondos, enfrentando hasta 15 años de prisión.